Los que se meten bajo la oscuridad del faldon

miércoles, 29 de julio de 2009

Luis Carlos Oriol Varela


Bueno, Luis Carlos es muchas cosas. Pero hay una por encima de las demás. Es "Hermano", y hermano con mayúsculas. Siempre atento a todo cuanto sucede a su alrededor, está pendiente hasta el último detalle con su gente. Lo conocí en persona hace ya tiempo, pero de vista lo conocía de muchísimo antes. Es de esas personas en las que su carisma te llama poderosamente la atención. Además, todo lo que tiene dentro del mundo de las cofradías se lo ha ganado a pulso, y nunca mejor dicho.

Por eso le dedico esta entrada, y la etiqueto en tres categorías distintas.

Capataces, pues lo es y de los buenos. Siempre se le vieron maneras, porque siempre las tuvo. Sonó desde chico tocar el martillo del Señor, el Dios de las Manos atadas que se pasea cada lunes santo por calles empedradas de un barrio con Gracia y con una parroquia como la Magdalena. Siempre lo tuvo en mente, y se lo gano poco a poco, como hay que saber ganarse las cosas y beberse los buenos caldos. Poco a poco. La confianza que tiene su cuadrilla en el es amplia y forjada en la amistad, la caballerosidad y el buen trato con sus costaleros. Además de un buen gusto a la hora de tocar y mandar ese martillo, atesora una calidad humana que le hace siempre poner los pies en el suelo. Nadie está por encima de la trabajadera mas que el Señor del Rescate y por el y por su hermandad trabaja. Y además, nunca deja de aprender. Cosa fantástica pues siempre tendrá algo nuevo que enseñar. Además, forma uno de los mejores tándem al frente del martillo, con su "compadre" Manuel Lasala.

Amigo, una palabra grande, pero que en este caso creo que la palabra se queda pequeña. Conmigo ha sido mas que eso en alguna que otra ocasión y por eso siempre le estaré agradecido.

Costalero, con mayúsculas porque he trabajado con él en un mismo palo y eso se sabe nada mas que ver la ropa y el aire que desprende por los cuatro costaos. Es costalero del Señor, y eso no se lo quitará ya nadie.

Así es Luis Carlos Oriol, Capataz del Señor de Granada, Capataz junto a Manolo Lasala de la Virgen de las Maravillas, amigo de sus amigos, casado y padre de una preciosa niña de nombre Carmen.

Vaya desde bajo la oscuridad de este faldón, mi abrazo enorme hacia mi capataz, mi amigo y mi compañero de trabajadera. Todo un artista, dentro y fuera del mundo de las cofradías.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El palio más romántico de Granada - La Virgen de las Maravillas

El palio más romántico de Granada - La Virgen de las Maravillas
Foto cedida por Victor Ovies, de su web www.granadaphoto.com

El Misterio de los Misterios - La Santa Cena Sacramental

El Misterio de los Misterios - La Santa Cena Sacramental