Los que se meten bajo la oscuridad del faldon

viernes, 11 de noviembre de 2011

Segundo día de las Jornadas de Capataces y Costaleros


Una noche más y al amparo crepuscular y taciturno de la piedra angular que es ancla de todo un barrio, donde la fe se desparrama en tardes silentes a las tres impares de la tarde, y donde el resto del año se musitan rezos y plegarias abandonadas en las comisuras de nuestros labios para gloria y alabanza del más grande y bendito de todos los nacidos, se celebró anoche la segunda sesión a la que estaban invitados los medios de comunicación, para explicarnos a los presentes, en qué, cuales y de que maneras abordan los temas de la Capatacería y Costalería granadina. Complicado y arduo estuvo el tema, y la verdad es que la jornada fue mucho más participativa, con algún rifirrafe que otro, cambio de impresiones del respetable con los contertulios y su mijita de guasa, que también la hubo. Formaban la mesa, Rafa Ortiz, Jorge Martínez, Fernando Argüelles, Juanjo Ibañez y Jorge de la Chica, pero este último se ausentó por motivos que a estas horas aun yo personalmente desconozco. Fue cubierta la vacante sobre la marcha y a la misma mesa se incorporó Carmen Padial. La batuta estuvo esta vez al mando de un Pepe Carvajal que comenzó rompiendo el hielo con algunos de sus chascarrillos, dimes y diretes, ya tan típicos de este Capataz granadino. Y para comenzar, no tuvo mejor pregunta que preguntarles a los presentes y ya sentados en la mesa, ¿¿¿ustedes cobráis???...


La segunda cuestión tirada encima de la mesa por parte de Pepe Carvajal fue la siguiente: ¿¿¿Que tiempo dedicáis en vuestros programas al mundo de la Costalería???... después de las contestaciones de todos y cada uno de los presentes, salvedad de Rafa Ortiz que si comentó algo de un reportaje sobre la familia Carvajal, solo nos quedó una cosa clara. Los Costaleros como mundo aparte de las cofradías o hermandades, no tienen un espacio propio, ni tampoco interesan más que al propio costalero. Todos y cada uno de los contertulios si coincidieron en que no se hacen los programas con cronómetro en mano, tanto tiempo para costaleros, tanto tiempo para los hermanos de fila, tanto tiempo para los de la priostía, etc, etc... cierto es que los programas que realizan, y que no es lo mismo hacerlos en radio que televisión, siempre estarán centrados en lo que sea actualidad, novedad, o noticia... y eso es así...


El problema que tiene el granadino, es que realmente no le interesa lo que se cueza debajo de los faldones. Los interesados somos nosotros mismos. Que pasos cambian de mando en los martillos, que cuadrillas se amplían o se rompen, quien es más guapo o a quien le queda mejor el costal... estas cosas son de barra de bar, de tertulia entre amigos, de costaleros de élite y poco más... al resto de los cofrades anónimos y sobre todo a la audiencia que puedan soportar estos programas cofrades, ya digo y repito, sean radiofónicos o televisivos, no les importa un carajo, palabra o término que utilizó Jorge Martínez, con el que yo me siento muy identificado por cosas que no vienen ahora al caso, pero que en Granada y siendo un poco malafollá, es mas lícito y genuino el decir que "no importan una polla"... y que no se me malinterprete, pues todos conocemos las maneras y el habla del granaino, así que no vayamos a rasgarnos ahora las vestiduras por ciertas clases de lenguaje, que todos coloquialmente utilizamos prácticamente a diario...


Cierto es como comentó Fernando Argüelles, que hoy día, ya no solo los medios de comunicación, sino las redes sociales y las nuevas tecnologías, hacen que las noticias sean más rápidamente absorbidas por el resto del entramado cofrade. Pero también es más cierto, que nos gusta un "salvame deluxe costalero" más que a un tonto un lápiz. Y esto lo escribo desde la certeza de haberme topado con muchas cosas en mi vida a las que no debí de entrar al trapo, y entré del tirón. No me arrepiento, de nada de lo hecho me he arrepentido en mi vida. Pero si aprendo, corrijo, e intento no volver a fallar o caer en el mismo engaño. Ya cuando me enseñan el trapo, dudo y miro hacia los dos lados, e incluso a veces, hasta para atrás... por si hay que correr  hacia adelante...


Carmen Padial por su parte, si considera que muchas veces la noticia está en los pasos, en sus costaleros o en sus capataces, y que es un mundo que está cambiando (la verdad es que lleva cambiando muchos años) y al que cada día se le presta "digamos que más atención". A esto Agustín Ortega, hoy como uno más del respetable, argumenta que ninguno de los espacios cofrades, ya sean por radio o televisión, tienen en la actualidad un programa propio y destinado única y exclusivamente al costalero, o a a costalería en general...

Juanjo Ibañez contestó que no hay que segregar la información, y extraer únicamente el mundo costalero y hacer con el un aparte. Jorge Martinez, prácticamente en la misma linea, vuelve a reincidir en lo anteriormente ya comentado, y es que la audiencia de sus programas, con el tiempo y la experiencia le han dicho que los que los ven, somos nosotros los costaleros y capataces que somos ¿cuantos?, ¿mil?, y que el resto de la audiencia de Granada capital y el cinturón, les da igual lo que pase bajo los faldones, ni les interesa, ni saben, ni quieren saber...


A esta cuestión, en la que yo estoy realmente de acuerdo, yo me hago una pregunta. ¿Tan importante es realmente el colectivo cofrade en Granada, como para dedicar espacios dedicados exclusivamente a solo unos pocos?, ¿cuantos somos realmente entre todos?, ¿quince mil personas, repartidas entre las cofradías y hermandades que actualmente tenemos?, ¿quince mil entre costaleros, camareras, hermanos de filas, músicos, y poco más?... señores, tenemos simplemente lo que nos merecemos. Ni más ni menos. Y a veces, hasta pienso que siendo como somos en Granada, tenemos hasta de más... un poco más de amor propio por lo nuestro, y nos iría de otras maneras en todos los ámbitos, sociales, políticos, empresariales, culturales, económicos, y como no, en los cofrades...

Cierto es que el tema costalero afecta a las hermandades, no a todas, pero si a la gran mayoría. Somos queramos verlo o no, uno de los colectivos más numerosos. Eso está a la vista, y eso se pudo ver y quedó patente y demostrado en aquella maravillosa Passio Granatensis, concretamente esa fecha ya marcada para muchos de nosotros del once de abril de dos mil nueve. Ahí, quedaron a las claras que el movimiento costalero de Granada tiene ya un peso específico, y que ciertas hermandades, que apenas ponen un cortejo decente en las calles, si no fuese por los que nos ponemos el trapo, o seguimos arrimando el hombro, no estarían a día de hoy donde están.


Pero eso sí, y es una opinión mía y personal. No nos creamos el ombligo del mundo. No saquemos los pies de los muchos platos que cada hermanda tenga en sus propios fregaderos. No seamos los que peemos en botija y encima me la llevo porque la botija es mía. No seamos los primeros en levantar la mano, apedreando nuestro propio tejado una y otra vez. Las cosas a nivel costalero en Granada están mejor que nunca han estado, y cierto es. Pero también últimamente hay un cierto tufo a cosas que a mi personalmente no me gustan, ni me agradan. Y es que nos estamos creyendo que sin nosotros, lo demás no sirve, ni tiene sentido, ni puede hacerse. Y no es así... estamos sobredimensionando el mundo del costalero y del capataz en Granada, y la propia idiosincrasia del propio granadino y de la propia ciudad de Granada no está poniendo una y otra vez en nuestro sitio. Somos así, y ya está...

Se siguió tertuliando acerca de si los medios caen en el chisme, de unas u otras cofradías, dependiendo de quienes sean estas. De las que se puede hablar con más o menos libertad, y de las que no se debe de decir nada, porque ya se sabe que algunas están cogidas con un par de pinzas, y me sobra una. Estos temas son una cosa que a más de uno siempre se nos han pasado por la cabeza. ¿¿¿Porque a esta Hermandad no se le pasa ni una, y esta otra Cofradía que viene fatal, no se le dice nada???... como dijo Pepe Carvajal, que bonita que va toda la hermandad, pero resulta que hay un costalero que lleva las zapatillas rojas... en fin, más de lo mismo. Ahí supongo yo que entrará la querencia de unos y otros, el gusto personal que a veces no nos deja ser todo lo neutros que debemos de llegar a ser para desempeñar ciertas funciones o profesiones en nuestras vidas, y por eso metemos a veces la pata tanto, que al final nos cuesta sacarla una vida y parte de la siguiente... y sálvese el que pueda...


También se habló de la sevillanización de los medios a la hora de utilizar el lenguaje cofrade. "Revirá", "Zancos", "Vueltas", etc, etc... y es verdad que un granaino que esté viendo la tele, o escuchando la radio, al final termina por decir, "ya estamos con las cosas de Sevilla, cojones"... y es verdad. Al que no le haya pasado escuchar eso, hasta en el mismo seno de sus familias, que lo diga. Adolecemos de no tener amor propio por lo nuestro, y es ahí donde radica el fallo y el error más grande del Granadino, sea costalero o no...

Juanjo Ibañez lanzó un ordago a "la chica" (no, no se trata de Jorge de la Chica, que a estas horas aun no se el porqué se ausentó de la mesa), y nos dijo a todos los que nos encontrábamos en aquella sala, que si el costalero de Granada, los capataces de Granada, el mundo de la Costalería en definitiva, estábamos preparados para la crítica. En Granada no estamos preparados para la crítica, ninguno. Nadie. Ni estamento, ni persona. No conozco a nadie menos autocrítico que a un granadino. ¿¿Como vamos a estar preparados para eso??... pero por lo tanto y partiendo desde la misma base... tampoco lo estarán nuestros queridos medios de comunicación, no??... esto podía convertirse en una pescadilla que se muerde la cola, una y otra vez. Terminar convirtiéndose en un debate estéril e insípido, y fue rápidamente sofocado.


Y vino uno de los temas que mas juego dieron. El o los motivos de callarse con unas, y no parar con otras. El decir, "ahora me callo, y ya no hablo más de lo que estoy viendo. ¡¡¡Juzguen ustedes!!!"... o el decir, ¡¡¡Dios mío de mi alma, que bonito lo que estoy viendo de venir, y con ustedes el Señor Alcalde, el Concejal de Turno, el Arzobispo de paso, o el Perico de los Palotes al que le tocó en sorteo el estar delante de los micros, o bajo el calor sofocante de los focos"... no tenemos un rasero, y menos cuando los gustos, pensamientos, querencias o simple simpatía de unos y otros que hacen radio o televisión, no los dejan ser "totalmente neutros" a la hora de realizar y desempeñar su labor "meramente informativa"... y ya entonces nos podíamos meter de lleno en el tema de la profesionalidad de cada uno de los que hacen estos programas, unos más conocidos que otros, ya sea por su bagaje en el tiempo, o porque su cara se nos queda más y terminamos diciendo aquello de "a este tío lo conozco yo"... el caso es que muchas veces los silencios no tienen explicación, así como no tienen explicación esas charlas que no vienen a qué, y se hacen cuando el paso está en un punto álgido de el recorrido oficial, llegando a su casa, o incluso saliendo de ella...


Se preguntó desde la sala, que si algunos medios no pueden ir más allá en el tratamiento de la noticia, por ser de dominio publico, o estar realizados con dinero de las arcas municipales. A lo que se respondió que es cierto que hay temas que no se pueden tratar seguramente de las maneras que a los medios o las personas que hacen posibles ciertos programas cofrades, les gustaría. Pero por una mera connotación ya no política, sino que es mejor dejar pasar ciertos temas peliagudos, que de todos son sabidos, y a los que no hay que darles mas bombo de la cuenta..."tal cosa pasa en Sevilla y montan un cirio del copetín, pero en Granada somos cuatro en comandilla, y al final somos los mismos para lo mismo. Yo he dicho cosas, que con el tiempo he llegado a pensar, ya no las digo más... y ahora, pues no las digo"... (Jorge Martínez dixit)...


En definitiva, los medios de comunicación no es que estén por la labor del Costalero, ni de la Costalería. Están y existen, por el conjunto de la vida cofrade, a la que tratan de decirles a sus oyentes, la mayoría "no cofrades" (aunque nosotros seamos los últimos consumidores de estos programas a la postre), que ahí están las cofradías, que se acerquen a ellas, a vivir su vida interna, la parroquia cercana a su domicilio, el Señor o la Señora de su barrio... esa es su labor, además de la de informar...

Y de paso, una puntillita, que a todos nos viene bien saber. Ni el Alcalde, ni el Arzobispo, ni el Presidente de Federación, ni el concejal de turno, ni muchísimas de las personalidades que debiesen de estar interesadas en temas de nuestras Cofradías lo están, y se puso el ejemplo de una entrevista a Monseñor Amigo Vallejo en Sevilla, poco antes del nombramiento del señor Asenjo Pelegrina, hoy en día actual Arzobispo de Sevilla. Se le preguntó en aquel momento por la incorporación de una hermandad en la nómina de las que realizan estación en el miércoles santo hispalense, y estaba al tanto de todo. Datos, nombres, opinión personal, etc, etc. Ahora vete tu en Granada y le preguntas a nuestro querido Arzobispo por los horarios que tanto dieron que hablar aquí en nuestra ciudad, para el reciente Miércoles Santo Granatensis vivido en este año que nos ocupa, que te dice Monseñor que "a que hora pasa el 4 por la Gran vía???... es que de horarios el va "cortito", pues no tiene mas horario que el de Dios"... o cualquier frasecita de estas...


Pero tanto de lo mismo si al que le realizas la pregunta es al Excelentísimo Señor Alcalde, a nuestro querido Presidente de la Real Federación de Cofradías, o a cualquier otro personaje relevante de nuestro panorama político-cofrade-amigo de ultima actualidad. Ni uno, señores, seamos conscientes de eso. Ni uno está verdaderamente al tanto de estos temas. Y ni siquiera entre el propio mundo cofrade de nuestra ciudad. Los hay de los que nos preocupamos por saber, estar al tanto de las cosas, interesarnos por nuestros intereses propios y algunos que no lo son ya tanto. Pero no queramos coger de Sevilla solo lo que nos interesa, ni queramos compararnos con ellos en lo que nos quede y no podamos. Señores, pies al suelo, bien pegaditos al suelo, sobre todo antes de levantar... porque son años luz, en multitud e infinidad de cosas. Pero ya no con Sevilla... con la misma Málaga, Córdoba o Cádiz y su vertiente gaditana de la hispalis cofrade, Jerez...

Y ayer, en el fondo y para no alargar más esto, y no querer meter mucho más la uña en algunos otros puntos que salieron anoche a la palestra, se dejo a las claras que seguimos siendo bastante políticamente correctos, porque si dejásemos correr la malafollá que todos atesoramos como buenos granadinos que somos, me da a mi, que por no tener, no tendríamos ni estas tertulias... así que larga vida a ellas, a quienes las hacen posibles y a los que acudimos a ellas, porque al menos disfrutamos y bien, de ellas y de el tercer tiempo...


Esta noche más, en la tercera sesión de estas II Jornadas de Capataces y Costaleros, donde estarán presentes José Manuel Quesada (Capataz de la Santa Cena y del Gran Poder) Francisco Cordones (Capataz de los Favores), Francisco Lopera (Capataz del Huerto), Domingo Collado Osuna (Costalero), y Ricardo Díaz, (Costalero), siendo la mesa moderada por David Gamero. Aunque algo escuché que se había caído del cartel por asuntos personales, José Manuel Quesada, y que lo sustituirá Luis Carlos Oriol, Capataz de la cuadrilla del Señor del Rescate.

Allí estaremos, si Dios nos lo permite... y lo dicho... enhorabuena a los artífices de estas tertulias, y a todos los que ya han pasado siendo contertulios, moderadores y espectadores de las mismas... y me quedo con una frase de Fernando Agüelles "es que es muy bonito el silencio de la calle San Juan de los Reyes con esos pajarillos de fondo"... yo también me quedo con el silencio, que siempre por norma es mucho mejor que decir "otras cosas"... por anoche, se cerraron las persianas, se corrieron las cortinas, hasta la próxima...

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Foto cedida por Victor Ovies, de su web www.granadaphoto.com

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