A veces se hace necesario, saber el porqué es así la música de nuestra Semana Santa... y otras veces no. Simplemente, abran los sentidos, y díganme si esto no es la música del Señor. Y si no lo es, que venga el Señor y nos lo diga. Yo solo les puedo decir que se sienten un rato con tiempo, el suficiente para escuchar a esta banda. Cigarreras... preparen los baberos de hasta ocho duros... abran los sentidos, escuchen la Música por y para el Señor. Dejen escapar ese izquierdo que les lance el corazón. Pónganse delante de un paso, en cualquier acera, y contemplen el paso acompasado de un cortejo nazareno, mientras de lejos escuchan estas bellas sinfonías con nombres y apellidos... que nos hacen más grandes, más humanos y más divinos a la vez. Señores... con ustedes si no la mejor banda del mundo, la más buena...
Así que pausen el reproductor, y disfruten de un pedazo de concierto...