Francamente hay que darte las gracias por tu tiempo y tu dedicacion. Y por darnos la oportunidad de sentir de nuevo lo que vivimos en un magnifico Domingo de Ramos. Cada chicota tiene su esencia y hasta las menos trabajadas tienen su aquel. Un abrazo y esta noche nos vemos.
No las merece, Pablo. Solo se intenta dejar constancia en este mundo a veces tan banal y falto de toda lógica, de los sentimientos que uno comparte, y que a veces, es capaz de transmitir, o eso al menos intento. Claro que nos vemos esta noche, si El nos lo permite. Y sí, todas las chicotás son especiales, hasta la más corta, sin música y sin cambios... pero el estreno que yo he tenido bajo el nueve palos del Realejo, ni en mis mejores sueños... fue un tremendo placer. Así que las gracias, a todos los que hicisteis posible el estreno, la chicotá, y toda la noche del Domingo de Ramos, bajo el Señor de la Cena, el Misterio de los Misterios...
Francamente hay que darte las gracias por tu tiempo y tu dedicacion. Y por darnos la oportunidad de sentir de nuevo lo que vivimos en un magnifico Domingo de Ramos. Cada chicota tiene su esencia y hasta las menos trabajadas tienen su aquel. Un abrazo y esta noche nos vemos.
ResponderEliminarole!!!tremendo,me ha gustado una jartá!!!luego nos vemos.
ResponderEliminarNo las merece, Pablo. Solo se intenta dejar constancia en este mundo a veces tan banal y falto de toda lógica, de los sentimientos que uno comparte, y que a veces, es capaz de transmitir, o eso al menos intento. Claro que nos vemos esta noche, si El nos lo permite. Y sí, todas las chicotás son especiales, hasta la más corta, sin música y sin cambios... pero el estreno que yo he tenido bajo el nueve palos del Realejo, ni en mis mejores sueños... fue un tremendo placer. Así que las gracias, a todos los que hicisteis posible el estreno, la chicotá, y toda la noche del Domingo de Ramos, bajo el Señor de la Cena, el Misterio de los Misterios...
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